ELLEN DUTHIE
Invitar a pensar a los niños, a poner palabras a los pensamientos y a la emociones es lo que hace este conjunto de tarjetas que aúnan una imagen potente, capaz de desencadenar ideas, junto con un conjunto de preguntas que ayudan a conducir la conversación. Preguntarse dónde reside la esencia de la humanidad frente a las personas y las cosas da para mucho. Para jugar se requiere un niño por adulto.