GALEANO, EDUARDO H.
Un libro magistral. Parece obra de un fabulista, pero las fábulas son verdaderas.ö Jean-Pierre Thibaudat, Libération, Francia. Tiene la a cidez y el humor de Jonathan Swift. ¿Qué otro escritor puede hacer que los esqueletos dancen, como Galeano hace?ö The New Yorker, EEUU. Es cuchar la voz de Galeano no sólo es útil. Es un placer.ö Fernando Parr a, Le Monde Diplomatique, España. Eléctrico y estimulante. Galeano e s un escritor de feroz integridad, un poeta de la condición humana...ö Selección de los mejores libros del año de The Village Voice, EEUU. Eduardo Galeano nació en Montevideo el 3 de septiembre de 1940 en el s eno de una familia católica de clase media. Hijo de un empleado públic o y de una gerente de librería, Galeano fue criado en un ambiente de p rofundas convicciones católicas. Incluso, cuando tenía ocho o nueve añ os, sostuvo que quería ser santo: «Tuve una infancia muy mística; pero no me fue bien con la santidad». Galeano tiene una larga carrera tan to en el plano personal como en el profesional. Con tan sólo trece año s empezó a publicar caricaturas para el diario El Sol, un periódico so cialista en Uruguay, bajo el pseudónimo de «Gius» por la dificultosa p ronunciación en castellano de su primer apellido (Hughes). Desde muy joven empezó a trabajar; fue obrero en una fábrica de insecticidas, re caudador, pintor de carteles, mensajero, mecanógrafo, cajero de banco y editor. En la década de los setenta un grupo derechista militar en Uruguay lo encarceló. Por esta causa se marchó a Argentina. Sin embarg o allí ocurrió lo mismo. El régimen de Videla tomó el poder tras un sa ngriento golpe militar y su nombre fue agregado a la lista de aquellos condenados por los escuadrones de la muerte. Días y noches de amor y de guerra, se enmarca en los días de la dictadura en Argentina y Urugu ay. En esta ocasión se exilió en Cataluña, en Calella, al norte de Ba rcelona donde publicó en revistas españolas y colaboró con una radio a lemana y un canal de televisión mexicano. En este período escribe su f amosa y premiada trilogía Memoria del fuego. Con todo, la obra de Gal eano no es lo único importante. Vinculado a causas políticas y defenso r de la ideología de izquierdas, recuerda cuando siendo miembro de la juventud socialista iba de pueblo en pueblo a hablar de socialismo ant e la mirada atónita de aquellos pocos que se paraban a escucharle. Ga leano sigue abogando por las ideas que condenan el neoliberalismo y si gue apostando por un socialismo real. Insiste en la crítica situación en la que se encuentra Latinoamérica, sobre todo entre las nuevas gene raciones que no creen en la democracia. Según Galeano, cuando un gobie rno adopta soluciones que comprometen a diferentes generaciones, tiene la obligación de consultar el pueblo, porque son soluciones que tendr án repercusiones durante mucho tiempo. Muy vinculado a este tema, Gal eano, comprometido con la causa ecológica, ha arremetido en numerosas ocasiones contra la producción industrial de celulosa en su país y con tra el gobierno de Tabaré Vázquez quien según él: «Ha convertido a Uru guay en un centro mundial de producción de celulosa», con las devastad oras consecuencias ecológicas que ello conlleva, pero: «La gente prefi ere morir de contaminación que morir de hambre». Galeano también ha h ablado sobre la inmigración diciendo que las fronteras se cierran al p aso de las personas pero se abren paso del dinero y de las mercancías. Sin duda, una de las facetas más conocidas de Galeano es su pasión p or el fútbol, reflejada en su libro Fútbol a sol y sombra, se lamenta de que los intelectuales no hayan sabido captar su verdadero significa do y de que siempre se haya creído que el fútbol atrofia la conciencia del pueblo y le impide pensar con la cabeza.
El propio autor reconoce que de niño quiso (como todos los uruguayos) ser jugador de fútbol, pero que por su absoluta falta de talento, no tuvo más remedio que hace rse escritor.
En 1985 regresó a Uruguay. Actualmente, tras haber supe rado una operación en el año 2007, reside en Montevideo. Uno de los lugares que le gusta frecuentar es el café El Brasileiro; además dirige su editorial El Chanchito.
En su obra se han basado otros personajes como el cantautor Joan Manuel Serrat, que ha tomado fragmentos de su o bra. El relato La noche, sirvió de inspiración a Serrat para su canció n Secreta mujer.
En Galeano conviven el periodismo, el ensayo y la na rrativa, pero será sobre todo reconocido como un cronista certero y va liente que recuerda el pasado para analizar el futuro que estamos dejando.