DE NERVAL GÉRARD
En su elogio a Viaje a Oriente, Teófilo Gautier ya subrayó el talento de Nerval para evitar el entusiasmo banal y las descripciones llenas de oro y plata de los turistas vulgares. De hecho, la larga permanencia en El Cairo es esto: una tentativa de fundirse en la multitud, una mirada al interior de la vida árabe. Nada más l legar, huye del Hotel Inglés y se hunde en el corazón de la vida local. Alquila una casa en el barrio copto, compra muebles, se pone unos pantalones anchos, una chaqueta bordada y un tarbouch.